Hoy le he vuelto a ver después de algunas semanas. Al verme dentro del bar sus ojos se abrieron como platos, y se le escapó una sonrisa. Pasó junto a mí. No pudo evitar sonreír, tampoco pude yo. La emoción me invadía. Sé su nombre, pero algo me dice que él desconoce el mío. Toda la vida conociéndonos y, a la vez, siendo desconocidos. 
Creo que aquella chica era su novia, nada extraño teniendo en cuenta su edad. 


Quizás el volver a verle no ha sido una simple casualidad. Quizás el destino nos quiera juntar. Quizás haya algo que quedó atrás. 


Mirar a su ventana y ver la luz apagad. Mirar en otro momento, que esté encendida y, por un momento, sentir alivio, euforia, alegría... Le siento tan lejos, pero a la vez tan cerca... Escuchar su voz ha hecho que se me erice la piel. Hacía tiempo que no la escuchaba. 
Que una sonrisa inundase su rostro al verme quiere decir algo. Parecía nervioso, aunque quizás es producto de mi enorme imaginación.