Todos cometemos errores

Sé lo que es perder a tus amigas por una miserable tontería, una confusión, un malentendido... que por orgullo nadie se atreve a arreglar.

Sé lo que es intentar arreglarlo y que te traten a la patada, aun te humilles, arrepientas, disculpes de todas las formas posibles... sin obtener resultado. Como si todo lo que habíais vivido hubiese sido tan sólo un bonito sueño, un sueño que sólo tú has soñado. Un sueño que forma parte de ti y de nadie más. Como si no les importaras lo más mínimo, como si todo este tiempo no os hubierais conocido.

Compartir con ellas penas, alegrías, el primer beso, la primera caricia, el primer amor... y que nada de ese importe ahora. Ahora sólo importa el error que cometiste. No vale que pidas perdón, no vale que te arrepientas, no vale que vuelvas con el rabo entre las piernas... ¿Qué vale entonces? Que yo sepa todos somos humanos, y el ser humano comete errores...

Si quieres y te importa una persona perdonas un error así, y más si conoces su historia, cuando has compartido tanto con él/ella...

Quisiera volver atrás, pero eso significaría renunciar a las grandísimas personas que han llegado a mi vida desde entonces. Mejor quedarme donde estoy, intentando hacer las paces, al lado de mis nuevas amistades, al lado de esas personas que espero que estén a mi lado por mucho tiempo, y si puede ser, durante lo que me queda de vida.

Quedaron atrás esas locuras de adolescentes que querían ser mayores, esas historias compartidas... Ahora es el momento de nuevas historias, de nuevas personas con quienes compartirlas, de sueños que se hacen realidad, de tardes al sol, de días de música y felicidad...